miércoles, 23 de septiembre de 2015

ABC:Nuevo descubrimiento en Pompeya:una tumba samnita del siglo IV a.C.


Pompeya continúa siendo una fuente inagotable de descubrimientos científicos. El último ha sido una tumba samnita, con el esqueleto de una mujer, entre los 40-50 años, de la mitad del siglo IV a.C. Es decir, de la Pompeya anterior a los romanos, es decir, antes de que en el 80 a.C., cuando Roma era ya República, la ciudad se convirtiera en colonia romana. Hay que remontarse, por tanto, al periodo anterior a la humillación romana de las Horcas Caudinas, la batalla que tuvo lugar en el 321 a.C., entre el ejército romano y el samnita. Por su favorable posición estratégica, los samnistas rodearon y capturaron el ejército romano de 40.000 hombres. Este dato histórico sirve para comprender la importancia del descubrimiento.

La tumba se encuentra en las inmediaciones de un taller de ánforas de cerámica. Dentro de la tumba, delimitada por losas de piedra, se encontraba el esqueleto de la mujer acompañado por una decena de cerámicas que constituían su ajuar funerario. «Pompeya sigue siendo una ciudad viva, que no solamente se ha de conservar, sino que se debe investigar y estudiar. Este descubrimiento nos permite profundizar en un periodo poco conocido de la historia de la ciudad, a causa de los pocos descubrimientos de esa época», ha manifestado el superintendente de Pompeya, Massimo Ossanna.

El nuevo hallazgo confirma que antes de que llegaran los romanos, Pompeya era un centro organizado de los samnitas, una auténtica ciudad, que se desarrollaba mediante el comercio en las orillas del río Sarno. Algo parecido a lo que después la Pompeya romana habría hecho durante decenios antes de la erupción del Vesubio en el 79 d. C.

Arqueólogos españoles en Pompeya

El descubrimiento de la tumba samnita ha sido realizado por un equipo de arqueólogos franceses, en colaboración con la superintendencia de Pompeya. Son varios los equipos de investigadores extranjeros, incluidos españoles, que trabajan en este parque arqueológico, el más importante y famoso del mundo. A finales de agosto, se hizo público otro importante descubrimiento en la necrópolis de Porta Nola de Pompeya, donde un equipo de 8 arqueólogos españoles, junto a otros ocho de diversas nacionalidades, encontraron 36 urnas cinerarias y una sepultura infantil. El arqueólogo y antropólogo Llorenc Alapont Martin, del Colegio de Doctores y Licenciados de Valencia , nos contó algunos detalles de los descubrimientos: «La excavación en la tumba de Obellius Firmus, una de las figuras más importantes de la ciudad al final de la época neroniana, ha sacado a la luz una urna funeraria con huesos quemados de una persona de unos 60 años, con una serie de patologías que indican que estaba bien alimentado y con buen nivel de vida. Incluso en la urna se depositó una moneda como ofrenda de los familiares a los dioses para que el difunto no tuviera problemas a la hora de alcanzar la otra vida. Podía ser un familiar directo de Obellius, quizás su padre. Hemos recuperado más de 500 fragmentos de hueso pertenecientes al lecho funerario, algunos cubiertos con láminas de oro, con una decoración espectacular: cascos e guerrero, guirnaldas… Este lecho funerario fue quemado junto al difunto en la pira funeraria. La sepultura es del 66-68 d.C.»