jueves, 25 de febrero de 2016

El glorioso circo romano de Tarragona, a debate


«Cuando en el año 2000 el comité internacional estuvo visitando Tarragona para decidir otorgar el reconocimiento de Ciudad Patrimonio de la Humanidad, la verdad es que no las teníamos todas. Pero fue en la última cena que tuvimos con ellos en la que, después de comida en Les Voltes e ir a tomar una copa en la sala El Cau y ver los baños de las señoras, el comité se dio cuenta de que Tarragona vive dentro del circo romano y la sociedad actual vive integrada con las ruinas romanas», explica el catedrático y profesor de Arqueología de la URV Joaquín Ruiz de Arbulo.

La importancia del circo romano para la ciudad ha sido motivo de múltiples estudios. Su ubicación y su estado de conservación hacen que sea uno de los más imponentes del mundo, ya que en la mayoría de las ciudades con ruinas romanas el circo se encuentra a las afueras del núcleo urbano. En cambio, en el caso de Tarragona, la vida convive pared con pared con la reliquia.

Es por eso que la Fundació Privada Mútua Catalana (FPMC), junto con el Comitè Científic de la Tarraco Biennal, presentaron ayer la tercera edición del Congrés Internacional d’Arqueologia i Món Antic, bajo el título La glòria del circ, que se dedicará de manera monográfica a los circos romanos. En el simposio se hablará tanto de las carreras de carros, el espectáculo, la iconografía, la arquitectura, especialmente la del circo de Tarragona, como también de la simbología de las competiciones circenses dentro de la cultura y la sociedad de Roma.

El congreso, que se celebrará desde el 16 de noviembre hasta el 19 en el Seminari, albergará a más de 150 especialistas de todo el mundo que pondrán en común sus estudios sobre los circos. Debido a la cantidad de aforo, la organización ha ideado un nuevo funcionamiento interno.

Cambios en el formato

El director del Institut Català d’Arqueologia Clàssica (ICAC), Joan Gómez Pallarés, explicó que «aunque la primera y la segunda edición del congreso fueron muy productivas, nos hemos visto en la obligación de idear una nueva fórmula para sacar provecho aún más de los seminarios y hacerlos más provechosos y efectivos para no perder tiempo».

Las sesiones girarán en torno a cuatro ponencias: L’espectacle. Iconografia de les competicions circenses; El món del circ. La documentació epigràfica; Arquitectura dels circs y El circ de Tàrraco. Cada una irá dirigida por un ponente-relator de prestigio internacional, los cuales aún están por confirmar. Ellos serán los encargados de hacer un relato de la cuestión y después coordinar las comunicaciones que previamente los especialistas ya habrán podido leer y estudiar, y así generar sinergias y debates con fundamentos. «Con la figura del ponente-relator, buscamos menos tiempo de habla y más de debate», añade Gómez.

Uno de los objetivos del congreso es involucrar a la sociedad de Tarragona en el estudio del patrimonio histórico de la ciudad. «Queremos que los tarraconenses sean conscientes de lo que significa y de la importancia del suelo que pisan día a día, y por eso durante la convención habrá sesiones abiertas al público», explica Ruiz de Arbulo. A nivel científico, el director del ICAC cuenta que el principal objetivo es poner en común el conocimiento alrededor de los circos romanos para así establecer los nuevos parámetros de estudio.

Coincidiendo con la celebración del congreso, la concejal de Patrimoni del Ayuntamiento, Begoña Floría, anunció que durante esos días se llevará a cabo una parte de las obras de recuperación de las bóvedas del circo por la parte de la Plaça dels Sedassos. «Gracias a la aportación de 100.000 euros de la Fundació Privada Mútua Catalana, este año hemos podido iniciar las excavaciones. Nos encontramos solos a nivel institucional para tirar adelante obras de recuperación de nuestro patrimonio, pero no a nivel civil», refiriéndose a la Fundación Mútua Catalana.