miércoles, 4 de enero de 2017

La historia de la Legio IX Hispana: La legión desaparecida en Escocia


Cuando al final de su vida, el estadista Winston Churchill colocó a la política en un segundo plano para dedicarse a la literatura mencionó, medio en broma, medio en serio, que “la historia será amable conmigo, porque tengo intención de escribirla”.Ciertamente lo fue, dado que no sólo ganó un Premio Nobel de Literatura, sino que además para la posteridad nos ha quedado más marcado su triunfo en la Segunda Guerra Mundial que su desastre en la campaña de Galípoli, sus pírricas victorias electorales que su fallida reelección. Pero en esto de acentuar los pros y oscurecer los contras Churchill no fue ni el mejor ni el primero, ya que por el buen hacer en dicha labor de unos escribas britanos desconocemos cual fue el paradero de una historia llevada al cine en varias ocasiones: la historia de la Legión IX, la conocida con el sobrenombre de “Legio Hispana” que desapareció en Escocia.

El origen de la formación

Las legiones fueron las organizaciones de combate a través de las cuales Roma consiguió expandir su imperio. Usualmente estaban formadas por cerca de 5.000 soldados de infantería, apoyados por unos centenares de jinetes. Fueron el principal sostén militar, y solían movilizarse para apaciguar conflictos en los límites del imperio, siendo temidos por todos por su disciplina y sus tácticas de combate frente a las que sus adversarios poco podían hacer.

En el caso de la Hispana se desconoce su año de formación, pero se estima que fue en el 60 a.C. y que participó en campañas de pacificación en la actual Francia y los Países Bajos. No obstante, la campaña más importante en la que participó fue en la provincia Hispania Tarraconensis, desde la cual se organizaron y ejecutaron ataques contra tropas cántabras. Es durante ese período donde la Legión IX se ganará su sobrenombre de “Hispana“, según algunos historiadores por haber estado asentada durante decenas de años en Hispania, según otros porque el grueso de sus integrantes era de origen hispano.

Uno de los datos que se tiene por cierto es su participación en la invasión de Britannia, esa isla cenagosa de poco valor estratégico y que consumió más recursos de los que proporcionó al Imperio. E incluso también se cree que participó en la construcción del muro de Adriano que históricamente ha separado Escocia de Inglaterra, aunque este supuesto tampoco está confirmado. Y es poco después de esto donde comienza el misterio, dado que a partir del 108 d.C. desaparece cualquier mención a dicha formación.

¿Qué sucedió con la legión?

Los historiadores romanos tenían por costumbre obviar en sus crónicas a aquellas tropas que habían sido derrotadas, para de ese modo no empañar la memoria de sus descendientes. Y es que si a los triunfadores les esperaba todo tipo de prebendas, desde columnas y arcos conmemorativos hasta tierras de cultivo y dotes pecuniarias, a los que no habían salido victoriosos simplemente se les sometía al olvido. Historiadores británicos como Ian Richmond y Rosemary Stucliff han sostenido que seguramente la legión fue derrotada por tribus caledonias, una hipótesis que de hecho está muy extendida en la cultura popular. Se dice que ni Hollywood ni las grandes editoriales pierden la oportunidad de tratar una buena historia, y esta ha sido llevada al cine en estos términos en películas como “La última legión” o “La legión del águila”, o en novelas como “El águila de la IX legión”.

Lo cierto es que por muy extendida que esté la hipótesis de la destrucción de la legión por tribus como los brigantes o los pictos, no se puede confirmar nada por falta de documentación. Para aquellos interesados en la historia de Roma, el futuro que le deparó a la legión es uno de los grandes misterios no resueltos, y con casi toda seguridad, jamás lo será.

Al margen de esta extendida versión, se apunta a otras teorías, como que fuera derrotada por tribus partas o en un enfrentamiento en Judea, hipótesis que tampoco pueden ser documentadas. Sucediera lo que sucediera, el futuro que le deparó es, junto a otros como el origen de Stonehenge o la identidad de Jack “El Destripador”, uno de los grandes misterios que tan presentes están en la historia del Reino Unido.